Hola a todos,
Deberíamos de empezar por diferenciar el vómito de la regurgitación. La importancia de saber la diferencia entre un término y otro es que son signos de enfermedades diferentes:
El
vómito es la expulsión violenta de contenido estomacal al exterior del cuerpo a través del esófago y la boca.
La
regurgitación es la expulsión retrógrada, de forma pasiva, de la ingesta desde el esófago o la faringe. No suelen observarse nauseas, arcadas ni contracciones abdominales como sucede con el vómito. Cabe resaltar que el schnauzer miniatura se encuentra en la lista de las razas predispuestas a la regurgitación.
Por lo que comentas, tu schnauzer podría estar padeciendo el
síndrome del vómito bilioso. Éste consiste en el reflujo gastroduodenal cuando el estómago del perro está vacío durante largos periodos de tiempo. Suele afectar a perros que, por lo demás, son normales y que se alimentan una sola vez al día por la mañana.
Los perros que padecen el síndrome del vómito bilioso suelen vomitar líquido teñido con bilis a última hora de la tarde-noche o por la mañana justo antes de comer.
Con esta historia clínica, ha de ser tu veterinario quien constate la ausencia de enfermedades digestivas obstructivas o inflamatorias y de procesos extradigestivos para confirmar la presencia del síndrome del vómito bilioso.

Normalmente, con administrarle al perro una comida más a última hora de la noche o a media tarde, según el caso, suele ser suficiente para que se cure. Si los vómitos continúan, se puede administrar metoclopramida o cisaprida para prevenir el reflujo. La mayoría de los animales responden al tratamiento y aquellos que no lo hacen permanecen, por lo demás, sanos.
No obstante, recuerda que esto es simplemente una posibilidad. Acude, como siempre digo, a tu veterinario, él es quien ha de examinar y valorar el mejor tratamiento para tu schnauzer.